Han tenido suerte. Le ha tocado a los nerazzurri el rival más flojo que había. Es el alemán un equipo de lo más irregular, que está haciendo una temporada de lo más mediocre en su país pero que, con la tontería, se ha plantado en la final de Copa y ha sido capaz de eliminar a todo un Valencia. Aun así, los de Leonardo no deberían tener muchos problemas para quitarse de en medio a un rival en el que, para que se hagan una idea, una de sus principales estrellas es Juradinho.
Por el bien de la afición milanesa, esperemos que no se repita la historia del antecedente más destacado: la final de la UEFA de 1997. En aquellos tiempos aún se jugaba a doble partido; ambos equipos vencieron 1-0 en sus estadios, y la tanda de penaltis del Giuseppe Meazza coronó a Jens Lehman, portero alemán que detuvo varios lanzamientos. Los Pagliuca, Bergomi, Zanetti (que ahí sigue), Winter, Zamorano y compañía se quedaron con las ganas de llevarse el trofeo. Aquí pueden ver cómo acabó aquello.
Eso sí, al año siguiente se desquitaron y se impusieron a la Lazio en la primera final a partido único de la historia de la competición. Con los alemanes, que yo sepa, no se han vuelto a enfrentar; puede ser buen momento para la vendetta.
1 comentario:
Yo digo que tanto uno como otro puede pasar la ronda, lo veo un 50/50, puesto que viendo varios partidos de uno y de otro hacen aguas en lo mismo, la defensa... veremos a ver que pasa al final.
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